Este viernes, alrededor de las 10, el Complejo Educativo Alberdi de bulevar Rondeau al 1400 recibió un llamado anónimo de amenaza de bomba y el establecimiento debió ser evacuado, indicó la jefa de la Brigada de Explosivos, Soledad Ocampo a Rosarioplus.com.

Lo mismo había sucedido el jueves en el Instituto Superior Politécnico, donde en agosto se registraron dos casos similares y donde ya entienden que se trata de una costumbre clásica en sus alumnos. Cada evacuación implica movilizar a cientos de alumnos.

El martes había sido el turno del colegio privado Brigadier López, de bulevar Oroño y Rioja. Y la lista sigue similar durante el mes de agosto, en que se recibieron 22 llamados anónimos según consignó en un informe la Brigada a pedido de la fiscal de Flagrancia Paola Aguirre, en el marco de una búsqueda de abrir una causa a partir de pruebas sólidas que impliquen el hecho.

Entre las actuaciones, también se investigan llamadas entradas y salientes de cada colegio, que según consignan fuentes de Fiscalia, "son teléfonos fijos que no tienen identificador de llamadas".

La subcomisario Ocampo puntualizó sobre estos hechos que “todas las amenazas de bomba son delitos de alteración del orden público, y aunque no hay sospechosos todavía, se trata de imputaciones NN”.