El prometedor avance del plan de vacunación en el país y la inminente llegada de dosis en las próximas semanas genera expectativas en cuanto al porcentaje de la población que podría inmunizarse durante el invierno y los objetivos a mediano plazo se empiezan a volver más ambiciosos.

Luego de una semana récord, con el arribo de 4.350.000 dosis de vacunas, entre AstraZeneca y Sinopharm –de las cuales 4.200.000 ya fueron distribuidas a las 24 provincias para ser aplicadas entre la población, el Gobierno nacional  anunció un acuerdo para la adquisición de 24 millones de dosis de origen chino, con entrega entre julio y septiembre (8 millones cada mes).

La información anticipada por la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, el viernes pasado, abre una posibilidad que hasta el momento parecía lejana: inmunizar contra el coronavirus a los menores de edad.

La chance de que los más chicos reciban un pinchazo comenzó a tener entidad tras el nuevo acuerdo con Sinopharm, ya que, hace algunos días, China aprobó el uso de la vacuna para personas  de entre 3 y 17 años.

Aunque el fármaco haya sido autorizado en el país asiático, el ensayo clínico que obtuvo el aval de las autoridades chinas debe ser analizado por la Anmat, y luego recomendar su uso de emergencia al Gobierno. Este proceso podría llevar su tiempo, más aún, si se tiene en cuenta que la urgencia en el país es cubrir con una dosis a los mayores de edad y completar el calendario de los que esperan su segunda dosis desde hace 90 días.

Si la llegada de vacunas a Argentina continúa a buen ritmo, este lunes a la madrugada partió un nuevo vuelo  a Rusia para traer componentes 1 y 2 de Sputnik V, y el Gobierno nacional decide pisar el acelerador para llegar a la primavera con la  tan ansiada “Inmunidad de rebaño”, la chance de que los menores tengan que poner el hombro en los próximos meses crece día a día.