Un joven de 18 años fue a la comisaría para denunciar que delincuentes mataron a su novia durante un asalto, pero tras inconsistencias en su relato se quebró y confesó que él fue el responsable del crimen. La víctima tenía 17 años. 

El joven se acercó a la comisaría 6° de la ciudad de Roldán para denunciar que había sido víctima de un robo, junto a su novia, en la vivienda en la que su padre trabaja como cuidador. Según su primer relato, en medio del hecho uno de los delincuentes le habría disparado en la cabeza a su novia causándole la muerte inmediata. 

Ante las declaraciones del joven la policía realizó un procedimiento en la vivienda mencionada y efectivamente encontró el cuerpo de la adolescente con un disparo en el cráneo. Sin embargo en la ampliación de su declaración, cayó en contradicciones que no pudo explicar y terminó admitiendo que él fue el autor del crimen.

La Policía de Investigaciones (PDI) dispuso un allanamiento en su casa, donde secuestró una pistola calibre 22 y un cargador con tres cartuchos.