La Justicia dispuso este viernes que el conductor del Renault Sandero que participó de la picada que terminó con las vidas de David y Valentino Pizzorno no sea imputado todavía, y permanecerá en prisión domiciliaria hasta mejorar su salud y tener el alta médica.

La junta médica realizada este viernes en los Tribunales Provinciales evaluó que “al momento G.S no se encuentra en condiciones físicas de afrontar un proceso de audiencia y eventual dictado de prisión preventiva efectiva”, fue la aclaración de voceros del MPA.

Esto fue decidido luego de que G.S. tuviera el alta hospitalaria del Sanatorio Laprida donde permanecía internado desde el día del choque hace poco menos de un mes. Y ocurrió en contraposición del deseo de Cintia, la mujer damnificada en el siniestro, que perdió a su marido y a su hijo, que desde temprano se manifestaba con sus allegados frente al Tribunal para que no sea otorgada la prisión domiciliaria.

Los fiscales de la Unidad de Homicidios Culposos Valeria Piazza Iglesias y Walter Jurado dispusieron que G.S permanezca “en calidad de aprehendido en su domicilio con custodia policial hasta la realización de la nueva junta médica donde se determinará si puede ser llevado a audiencia imputativa dependiendo de su estado de salud”.

En 15 días se realizará una nueva junta médica para evaluar la evolución de estado de salud para que el joven que realizaba la picada con su amigo, que cumple prisión preventiva, tenga el alta médica y resulte imputado por el MPA por el doble homicidio.