Muchas aerolíneas tienen a su flota sin uso por las restricciones impuestas en las rutas internacionales. Por lo que una empresa aérea de Australia le encontró la vuelta a esta problema y tuvo una ingeniosa idea para paliar la crisis que generó la pandemia por la falta de vuelos.

Se trata de la aerolínea Qantas que el próximo 10 de octubre usará un Boeing787 Dreamliner para realizar "un vuelo a ninguna parte". Y aunque el destino parece poco claro, la gente tiene tantas ganas de viajar que los pasajes se agotaron en tan solo 10 minutos.

Aunque se promocionó de esa manera, el vuelo sobrevolará distintos paisajes y los principales atractivos turísticos de Australia y el vuelo no cruzará las fronteras. Sería algo así como pasear por el país en avión durante siete horas.

Más allá de que la empresa celebró lo rápido que se vendieron los pasajes, lo cierto es que la idea de estos vuelos "sin rumbo fijo" surgieron como plan para frenar la crisis que enfrenta Qantas desde la llegada del coronavirus y que ya la llevó a despedir a más de 6000 empleados.