Mirta Aguirre, de 22 años, había decidido vender helados a través de la ventana que da a la calle Urdinarrain al 6900, a metros de Génova y Provincias Unidas. Quería aprovechar que la el inicio de la temporada de primavera-verano para tener un ingreso más en la castigada economía familiar. En esa misma habitación de la rudimentaria vivienda donde atendía, es donde recibió un tiro fatal en su cabeza este martes por la noche por una de las tantas balaceras del barrio. 

Su hermana menor estaba con ella en el momento fatal y relató la situación: "Eran cerca de las 19:30. De la nada escuchamos los ruidos. Me quedé sorda de un oído y me agaché y cuando me levanté la vi a mi hermana toda llena de sangre". 

Según los primeros peritajes, ingresó por la ventana uno de los ocho balazos que dos sujetos en moto dispararon contra el frente de la vivienda. "Estamos en shock. Ella era inocente, estaba todo el día en casa y atendía la heladería", dijo a LT8 la principal testigo, quien reveló que eran repetidos los disparos en la esquina.

Hasta el momento no se saben los motivos por los cuales dispararon, si hubo intenciones de amedrentar a quienes viven en el lugar o si por algún motivo personal. Según le dijeron al móvil de Sí 98.9, la ambulancia y la policía tardó en llegar casi una hora. "Estaban las dos tranquilas mirando tele, más no puedo decir. La más chica vio a su hermana y llamó. Yo estaba trabajando, llego a las 20, también me pudo pasar a mí porque miramos tele ahí todos". agregó la madre de la víctima.