La desembocadura del arroyo Ludueña amaneció obstruida por una gran cantidad de botellas, animales muertos y otros desechos, que están siendo arrastrados hacia el canal principal del río Paraná. Esta situación fue capturada en un video filmado por trabajadores que salían desde una guardería cercana a esa zona del Parque Alem, mientras intentaban llegar al río con sus embarcaciones este miércoles por la mañana. Las imágenes muestran las dificultades que experimentan para llegar a su destino debido a la obstrucción del arroyo.

Según los habituales visitantes de sus riberas, esta problemática es recurrente y la única solución efectiva para limpiar el área es esperar a que llueva lo suficiente como para aumentar el caudal del agua y arrastrar la basura acumulada. A pesar de que la Intendencia presentó hace unos años la embarcación de higiene llamada “Sabalito Barredor” como una alternativa viable, esta herramienta nunca se usó y ahora luce abandonada en el lugar, y rodeada de residuos, como una paradójica postal.

"Esta situación se repite diariamente. Como trabajador del club Náutico Malvinas Argentinas, salgo todas las mañanas de la isla y cuando el río crece, los residuos como botellas, animales muertos y árboles, quedan estancados sin que nadie los vea. Es una problemática constante", explicó Joaquín González, socio del mencionado club. El mismo se encuentra ubicado en el arroyo, por lo que se ve particularmente afectado por la contaminación del curso de agua.

González explicó posteriormente que hay alrededor de 50 metros de botellas esparcidas por el cauce de la desembocadura del arroyo Ludueña. Cada vez que sale hacia la isla, tiene que apagar el motor y pasar con los remos, ya que los animales muertos se enganchan en el motor y corre el riesgo de que se rompa.

Además, destacó que esta problemática impacta en todas las instituciones de la costa, pero que algunos clubes privados, debido a su mayor capacidad económica, optan por sacar la basura de sus instalaciones para que no sea visible: "No se trata de llevarla a un contenedor para su posterior traslado al basural. Lo que hacen es remolcarla con una lancha y sacarla fuera del lugar, ya que las amarras en estos clubes son costosas y los socios no quieren lidiar con la presencia de residuos".

"No vino ningún funcionario. Alguna vez fueron al club a hablar con el comodoro, pero fue una charla y nada más", concluyó. 

El arroyo como la cloaca de Rosario 

En febrero de este año, cientos de peces muertos aparecieron este en el arroyo Ludueña, cerca del shopping Portal Rosario, tal como venía sucediendo en otros cursos de agua como consecuencia de la sequía y también la contaminación ambiental. El Ludueña, en este caso, viene siendo eje de discusión desde hace muchos años por la cantidad de basura y contaminación que se detecta en el agua y que padecen los vecinos. Los niveles de podredumbre en el ambiente y la peligrosidad de convivir con agua tóxica generan que incesantemente las personas estén pidiendo una solución definitiva.

Marcelo Ferraro, un vecino que no se resigna, aseguró  en esa ocasión a RosarioPlus.com que esta situación en particular comenzó hace aproximadamente cinco años aguas arriba de la cuenca, sobre la zona cercana a Funes, donde el arroyo “es una cloaca, el color del agua es blanca y de un olor nauseabundo”.

“He descubierto que hay caños de Aguas Provinciales que arrogan mierda al arroyo, junto con una casilla de agua de tratamiento de afluentes que cuando colapsa vierte los desechos sin tratar, esto sumado a los caños clandestinos de todo tipo y desechos. Y no quiero pensar en todos los demás que están entubados y no los vemos. Todo esto lo sabe la Municipalidad y el Ministerio de Medioambiente de la provincia”, señaló Ferraro y lamentó lo poco que se hizo hasta el momento.

Propuestas políticas y la lucha en el Concejo

La concejala socialista Mónica Ferrero fue una de las edilas que ingresó un pedido de intervención inmediata del gobierno de Santa Fe frente a la contaminación que afecta al arroyo Ludueña y a todo su entorno y ambién reclamó que el Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat y el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de la provincia realicen una inspección de toda su cuenca de 19 kilómetros para determinar los posibles causales de contaminación. El proyecto había sido tratado previamente por integrantes de la comisión de Ecología y Ambiente del Concejo Municipal. 

“Estuvimos en el lugar y observamos una gran cantidad de peces muertos y detectamos olores nauseabundos a químicos. En 2021 habíamos presentado un pedido de informes por este tema que se repite”, dijo Ferrero quien consideró que resulta urgente una inspección en la cuenca superior e inferior del Ludueña.

En el mes de febrero de 2022 en la zona de Stella Maris se sacaron 702 mil kilos de basura. “El olor era espantoso, tuve que hacer todo con los vidrios de la cabina cerrados. Y también tuve custodia, por las dudas. Uno de los días vino un concejal a sacarse una foto". El edil es Lisandro Cavatorta, que posteó en sus redes sobre el tema”, habían manifestado los vecinos.

La contaminación del Ludueña suma otra denuncia: “Ahí va toda la mierda"