Los “escritorios” en el fútbol, aquellas sanciones administrativas que inciden en los resultados futbolísticos, no paran de sorprender por estos días al fútbol sudamericano. Luego de la clasificación en la Sudamericana de San Lorenzo tras la mala inclusión de un jugador rival, y de la situación entre Independiente y Santos por Carlos Sánchez, ahora fue River el que estuvo en problemas.

Es que el mediocampista Bruno Zuculini firmó planilla en los siete partidos de la Copa Libertadores, cuando debía dos fechas de suspensión en Conmebol.

El interrogante es sobre qué podría suceder, aunque sí está claro que Zuculini no podrá jugar la revancha frente a Racing, el próximo miércoles en Núñez. Ya terminó el plazo reglamentario para que Racing pida los puntos, pero la Conmebol pudo haber actuado de oficio y darle ganado por tres goles el partido de ida a los de Avellaneda. Pero ya confirmó que no lo hará. No obstante, este viernes informó a través de un comunicado que el club millonario tiene razón en su descargo: Zuculini no debería haber jugado ese partido en el que empató con la Academia 0 a 0, pero a los de Avellaneda se les pasó el plazo reglamentario para protestar. Por lo tanto, no hay margen para sancionar a la banda roja. 

El 28 de agosto del 2013, Bruno Zuculini fue expulsado jugando para Racing contra Lanús, por insultar al árbitro, en la Copa Sudamericana. Le dieron cuatro fechas de suspensión, pero con la amnistía del 2016, quedó en dos. En la actual Copa Libertadores, Zuculini firmó planilla en los siete partidos de River, e ingresó en tres partidos, el último justamente frente a Racing.

Finalmente, la Conmebol publicó esta madrugada un comunicado para informar que River no recibirá ninguna sanción por la mala inclusión del jugador. Explica que el plazo de Racing de 24 horas pospartido para reclamar expiró, y a su vez reconoció su responsabilidad por no haber indicado que el ex Racing estaba imposibilitado de actuar, luego de la consulta que había efectuado el club de Núñez.

Ahora el entrenador Marcelo Gallardo está en problemas porque Zuculini iba a ser el reemplazante del expulsado Leonardo Ponzio. Ahora deberá poner a un joven de la reserva o correr a Enzo Pérez al mediocampo central, tal como lo ha hecho en Valencia.