Con las nuevas medidas anunciadas por el Gobierno nacional, que repercuten en sectores sociales con un achicamiento de la asistencia social y del empleo, el ministro de Desarrollo social Jorge Álvarez participó de la reunión del gabinete social municipal de Rosario y ratificó la sintonía con la postura de Mónica Fein en el objetivo de “seguir fortaleciendo los vínculos con las instituciones sociales para no dejarlas solas en los barrios”.

Álvarez aseguró que “la política de este gobierno se opone a la decisión de recortes nacional que implica a los planes sociales”, a la vez que aclaró: “Lo que se busca es fortalecer todas las aristas, y especialmente la seguridad alimentaria, ya que el recorte nos implicará reforzar nosotros las partidas, que este año fueron incrementando constantemente. Y así seguirá mientras sea necesario”.

El funcionario reflexionó sobre la eliminación de la tarifa social, que “incide en un sector importante de la sociedad –además de los sectores más vulnerables- como los jubilados, el subsidio al transporte, la salud”.

El ministro destacó que continuará el acompañamiento de los gobiernos locales y organismos, con alrededor de 600 convenios, que continuarán en pie y en crecimiento, pero criticó que “Nación no puede desligarse del problema básico del alimento en los sectores más vulnerables”.

Consultado por el presupuesto que conlleva la política de fortalecer a las organizaciones, Álvarez recordó que “fue creciendo desde el comienzo”, que hace poco más de un mes ya superaba el 127 por ciento, y hoy supera el 150 por ciento del que había al comienzo de su gestión.

En tanto, reclamó que la ministra Carolina Stanley convoque para dialogar a los ministros de Desarrollo porque “desde junio de 2016 que la Provincia recibe el mismo monto mensual de 25 millones de pesos”, y que haya una inversión destinada al alimento, “en transferencias genuinas, no discursos, en esta realidad de emergencia social”.