El distanciamiento no jugó y los rosarinos se fundieron en cantos abrazos y festejos por haber logrado el Campeonato de América. Ni bien terminó el partido los cantos empezaron a escucharse como un eco que venía desde adentro de los hogares mientras que las calles estaban desiertas, a los minutos esos ecos tuvieron rostros que se asomaron por toda la ciudad en manada, caminando o en vehículos que empezaron a acompañar los cantos con bocinas. El destino era, claro, el Monumento. 

Masivo festejo por el campeonato de la Selección

Miles de personas coparon la explanada y el tránsito se tuvo que cortar en distintos accesos, cuando ya no era posible que quepa un auto más y algunas calles pasaron a ser doblemano para poder descontracturar la circulación, como la bajada Sargento Cabral que por algunos varios minutos fue subida.

Masivo festejo por el campeonato de la Selección

Los festejos estuvieron acompañandos por una pryección en el monumento que decía Campeones y engalanaba el punto de encuentro. Peor los que asistieron también llevaron lo suyo. Bubuzelas, banderas y remeras agitándose, gorros, globos y hasta pinturas en la cara, nada faltó para que sea una verdadera fiesta. 

Masivo festejo por el campeonato de la Selección