Peng Shuai es una celebridad deportiva china quien llegó a estar entre las mejores tenistas del mundo y que esta semana desató una tormenta al acusar al ex viceprimer ministro de su país, Zhang Gaoli, por haberla forzado a tener relaciones sexuales. 

La jugadora realizó la denuncia a través de su cuenta verificada de Weibo, versión china de Twitter, y aunque a la media hora la borró, ya se habían realizado cientos de capturas de pantalla que se viralizaron y el hashtag  con su nombre llegó a acumular más de 20 millones visitas.

En su publicación Peng afirmó que Gaoli la había violado  en 2008 cuando la invitó a su casa a jugar al tenis y que mientras todo esto ocurría su esposa había permanecido como guardia en la puerta de la habitación.  También aseguró que luego la relación se prolongó de manera intermitente por unos 10 años. 

"Sé que alguien con tu poder, viceprimer ministro Zhang Gaoli, diría que no tiene miedo. Pero voy a decir la verdad aunque eso signifique golpear una gran roca con una pequeña piedra, o la autodestrucción de una polilla que ataca una llama”, escribió en su post la tenista y agregó: "Esa tarde nunca te di mi consentimiento para hacerlo y después no pude dejar de llorar, no podría describir lo asqueada que estaba. Me llevaste a tu casa y me obligaste a tener relaciones contigo. Me siento como un cadáver andante que no sabe quién es verdaderamente”.

Durante el relato, Peng reconoció  que no cuenta con pruebas que respalden sus afirmaciones pero aseguró que lo que había vivido absolutamente cierto: "No tengo pruebas. Me fue imposible conseguir alguna. No hay registro de audio, ni de video, solo mi experiencia que es muy real".

El movimiento #MeToo comenzó en China en 2018 cuando una estudiante universitaria de Beijing acusó públicamente a un docente de acoso sexual, las denuncias luego empezaron a extenderse hacia otros sectores, hasta ese entonces poco y nada se hablaba al respecto en China. 

En relación a Peng, es la primera vez que un escándalo de estas dimensiones llega a esferas tan altas del gobierno de ese país, aunque hasta el momento ninguna autoridad se ha expresado al respecto y la cuenta de la deportista permanece sin la posibilidad de recibir comentarios.