El tenis femenino toma impulso en el país de la mano de la rosarina Nadia Podoroska. En las
escuelitas se puede ver a muchas niñas empuñar por primera vez la raqueta, mientras que las que compiten a nivel nacional intentan emular a su ídola con el sueño de llegar a ser profesional y vestir la celeste y blanca.

Podoroska sumó sus primeros puntos en el ranking de la WTA a los 14 años y 9 meses, la tercera más joven en la historia de este deporte en la Argentina, después de Gabriela Sabatini con 14 años y 5 meses y de Gisela Dulko con 14 años y 7 meses.

El camino no es fácil, pero tampoco imposible, por lo que varias jugadoras locales se embarcaron en el desafío ya base de esfuerzo y mucho sacrificio lograron ubicarse entre las mejores del país. Una de ellas es Lourdes Ayala, número uno del ranking nacional en menores de 16 años, quien ya comenzó a incursionar en su ingreso al profesionalismo, le sigue Caterina Assi quien ocupa la décima posición en la misma categoría. Por su parte Luna Cinalli se encuentra en el puesto cuatro de Sub 14 y Josefina López, se ubica ocho en el escalafón nacional. Ayala y Cinalli tienen un denominador en común, las entrena el ex tenista Eduardo Schwank.

Otra de las proyecciones locales que se destaca es Luisina Giovannini, de 14 años, quien terminó la última temporada liderando el ranking nacional y había comenzado a viajar al exterior en busca de su inserción al profesionalismo. Debido a la interrupción del circuito por la pandemia entre mediados del año pasado y este se quedó a entrenar en Rosario y participó de las clasificaciones de varias competencias del Women's World Tennis Tour Calendar de ITF.

El auge del tenis de mujeres en el país va en sintonía a las decisiones y acciones que vienen tomando distintos actores vinculados a este deporte. La Federación Santafesina de Tenis cuenta con un Departamento de Tenis Femenino, cuya madrina es Podoroska, desde el cual a través de distintas actividades se da impulso para fomentar la práctica, apoyar y guiar en sus carreras a las jugadoras.