Cuatro años después de la sanción de la ley de identidad de género, el vicepresidente de la FALGBT, Esteban Paulón, reveló que son más de diez mil las personas trans que ya accedieron al cambio de nombre y sexo registral en el DNI. Dijo además que el trámite se realiza “sin mayores inconvenientes".

Por su parte, la referente de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA) Marcela Romero manifestó que la ley de identidad de género "solucionó el 30 por ciento" de los problemas de la población trans.

"Celebramos cuatro años de poder realmente ser parte de la democracia, porque antes no existíamos en la agenda política; pero ahora hay que trabajar por la inclusión social", precisó Romero y añadió: "La salud integral y la inclusión laboral son las dos grandes materias pendientes".

En ese sentido, Esteban Paulón reclamó que la población trans sea beneficiada con algún proyecto como el de "Empleo Joven", una iniciativa del Ejecutivo Nacional que beneficia a las empresas que dan empleo a jóvenes en busca de su primer empleo.

"Sería importante incluir otros grupos en este tipo de leyes porque los índices de exclusión laboral entre la población trans duplican a los de los jóvenes", dijo.

Sancionada en 2012, la ley 26743 de Identidad de Género garantizó el derecho a la identidad autopercibida a través de una rectificación registral por vía administrativa del DNI, y a la salud integral, incluyendo el acceso a "intervenciones quirúrgicas totales y parciales y/o tratamientos integrales hormonales para adecuar su cuerpo, incluida su genitalidad, a su identidad de género autopercibida, sin necesidad de requerir autorización judicial o administrativa".

Su aprobación representó un hito, pero ser la primera en el mundo que no requiere diagnósticos médicos o psiquiátricos, ni operaciones de adecuación corporal para el acceso a este derecho.