El miércoles de sol radiante acompañó a los miles de pibes de los barrios que se sumaron a la jornada de reclamo en la plaza San Martín, y que temen por un rumor de finalización del programa Nueva Oportunidad con el cambio de gobierno provincial. Casi 18 mil chicos son los que se capacitan en diversos oficios para su futuro gracias a esa iniciativa.

Cuarenta organizaciones de base bancaron la parada desde temprano en el corazón del centro rosarino para visibilizar la necesidad de continuidad. El programa alcanza a sectores vulnerables: chicos que salen de consumos problemáticos y víctimas de violencia de género o en conflicto con la ley.

El coordinador del programa Luciano Vigoni recordó que “el encuentro lo armaron ellos y es una preocupación que no haya certezas de continuidad o no, no es que alguien dijera que se cerraba, pero a dos meses de asumir tampoco aseguraron que seguía”, y puntualizó que “también hay un planteo de los jóvenes hacia el Estado por cómo sería una reformulación o modificación”.

Historias 

Jacquelina es acompañante en el grupo de Repostería 1 y 2 en el barrio Toba, y relató a Rosarioplus.com que “el rumor es que no continuamos en diciembre, y los sueldos que tenemos los docentes y acompañantes se están pagando atrasados, así como otros presupuestos como la nafta para las traffic de los chicos que llevan a las escuelas”.

Ella trabaja con María Inés, la profe de repostería que se dicta junto a otros nueve en la cooperativa de limpieza y zanjeo llamada Los tobas y La roca, donde son alumnos unos 250 chicos. “Dictamos cinco cursos para jóvenes en el barrio, y también vamos a escuelas primarias y secundarias, y es tal el interés que tenemos muchos en listas de espera, pero no dejan entrar a más, y por eso quizás no continúe”, precisó Jacquelina.

Los acompañantes como ella tienen el rol clave de convocar a los chicos, incitarlos a que sostengan sus capacitaciones y si se puede, a organizarse cooperativamente en grupo. “En los cursos nos van contando sus historias, y como los escuchamos también a veces los ayudamos a ir a un psicólogo, un turno con un médico, y muchos volvieron a la escuela, porque les hacemos entender lo importante que es que la terminen para el mundo laboral”, aseguró.

María Inés reconoce en sus alumnos muchas ganas de armar alguna cooperativa, aunque por lo pronto muchos de ellos venden sus tortas en la Feria El Tanque, y recordó que “son varones y mujeres, que les gusta mucho hacer torta frita o asada, y aprenden cosas complejas”.

Noelia es profesora de peluquería en el barrio Triángulo de la zona oeste, donde se encuentra la nación Qom a la que pertenece junto a otras naciones. Pero antes de ser profe y saber que le gustaba enseñar, fue alumna del taller de fotografía en el Centro de Convivencia Barrial, donde después del Presupuesto Participativo comenzó en 2013 a aplicar el programa Nueva Oportunidad. “Al taller de foto y video le sumamos la parte de estética, con manicura y peluquería, y después comenzaron los cursos de peluquería donde comencé acompañando, y el de panificación”, recordó emocionada con su crecimiento y el del grupo, donde es profesora en la vecinal “27 de febrero”.

La joven relató sobre ese crecimiento: “Somos unos 20 chicos, entre hombres y mujeres que nos fuimos capacitando y organizando, y ya tenemos un centro comunitario propio para independizarnos del programa provincial, y ya cinco del total tenemos nuestra propia peluquería”.

Ahora que cuentan con su propio espacio, que de a poco se organiza y regulariza, Noelia contó que “la idea es seguir dando el curso de introducción a la peluquería, pero enseñando otras cosas de importancia para aprender a emprender como la sustentabilidad del negocio, el marketing y la relación con el cliente, por lo que trabajamos mucho en grupo para darles seguridad como proyecto de vida a los jóvenes y no tan jóvenes que busquen aprender”.