La novela del teléfono de Cantero en su celda, tuvo un nuevo capítulo. Es que este jueves, los fiscales Franco Carbone y Federico Rébora, que investigan la última balacera contra el Centro de Justicia Penal, pidieron un nuevo allanamiento en Marcos Paz. Y para su sorpresa, encontraron que se le había repuesto el aparato telefónico al líder de Los Monos.

Pocas horas antes, el Servicio Penitenciario Federal había anunciado oficialmente la decisión de "presentar una denuncia penal y proceder a la suspensión y apertura de un nuevo sumario de los agentes penitenciarios responsables de la custodia y seguridad del pabellón en el que se encuentra cumpliendo condena el Sr. Cantero". E informó a que "a raíz del allanamiento realizado por la justicia santafesina el 23 de agosto, se instaló un teléfono público con mecanismos antivandálicos, se inició sumario interno y se suspendió a los agentes penitenciarios responsables de la seguridad de ese pabellón y del área requisa de la unidad".

No obstante, en el nuevo allanamiento pedido por los fiscales Carbone y Rébola, del que participaron efectivos de la Policía Federal y la División Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal, se volvió a encontrar el aparato dentro de la celda. La medida por exhorto fue solicitada al Juzgado Federal 3 en turno de Morón. Y según fuentes del Ministerio Público de la Acusación, hay contacto permanente por el tema con la fiscal federal 2, Mariela Labozzetta.