El exministro de Seguridad de Santa Fe entre 2015 y 2019, Maximiliano Pullaro, declaró este martes en el marco de la causa a Los Monos por los ataques a funcionarios judiciales ocurridos en 2018. El actual diputado provincial sostuvo que temían por la vida de "los jueces, de magistrados, pero además de personas". "Sentíamos que estas balaceras no tenían una lógica clara de a quién se podía atacar", sentenció.

En ese sentido, aseguró: “Sabíamos los costos de ir a fondo contra las mafias, pero acá no hubo pacto con el crimen organizado y por eso el Estado no se quebró a pesar de las amenazas y atentados que sufrimos los funcionarios políticos y judiciales involucrados.”

La serie de ataques perpetrados contra sedes judiciales y viviendas de funcionarios que habían participado de la investigación y juicio a Los Monos que culminó en 2018 puso en vilo a la gestión del exgobernador Miguel Lifschitz y su titular en la cartera de Seguridad.

 "Pusimos custodias sobre los magistrados, los fiscales, los domicilios. Turnos de 8 horas con dos personas por móviles, o sea por lo menos 6 personas por día para custodiar cada uno de los domicilios. Tuvimos 20 domicilios en custodia por parte de la policía de Santa Fe", detalló Pullaro.

Sobre el costo que esto tuvo en las arcas del Estado, indicó que "fueron alrededor de 6 o 7 millones (de pesos) que estábamos invirtiendo por mes para garantizar la seguridad".

El actual precandidato a Senador Nacional por la lista Evolución dentro de Juntos por el Cambio, afirmó haber sido “parte de un gobierno que tomó la decisión política junto a la justicia, de que no exista impunidad para las mafias”