Trabajadores y delegados del Hospital Roque Sáenz Peña asistieron a la reunión de la comisión de Salud del Concejo Municipal para dar cuenta de la crítica situación actual por la que están atravesando. De la audiencia participaron los delegados Martín Crer, Andrea Vitar, Natalia Hawlin y Mariana Mendoza, quienes hicieron hincapié en el estado de deterioro del edificio, las condiciones edilicias y la falta de mantenimiento.

Manifestaron que los reclamos surgen porque no están dadas las condiciones para trabajar ni para ofrecer una salud pública de calidad. En tanto, explicaron que si bien han tenido reuniones con los directivos del hospital, no hay respuesta a las demandas. Asimismo, pidieron la ampliación de la guardia por el aumento de heridos en contextos de hechos de violencia.

En este sentido, sostuvieron que actualmente y por la situación socioeconómica, existe una alta demanda debido a que mucha gente se vuelca al sistema de salud pública, lo que repercute fuertemente en todas las áreas (enfermería, camillaje, emergencia, atención médica, etc.).

Además subrayaron que la pandemia ha provocado cambios negativos en el sistema de salud, tales como reducción de cargos -por fallecimientos a causa del covid, enfermedades, jubilaciones- que no se han vuelto a cubrir, además de la disolución del Triage.

El triage es un sistema de selección y clasificación de pacientes en los servicios de urgencia, basado en sus necesidades terapéuticas y los recursos disponibles. Permite una gestión del riesgo clínico para optimizar la atención y la seguridad de las personas y esto no ha sido repuesto, con el consiguiente perjuicio para la calidad de la atención.

Por último, remarcaron que a la situación edilicia y de deterioro en la cual trabajan, se les suma la falta de un reconocimiento profesional, sin respuestas y sin mejoras de sus salarios.