Un juez rosarino intervino en una estafa electrónica por la que un hombre sufrió el hackeo de su cuenta personal en Banco Macro y así se hizo deudor de un préstamo abultado. El titular del juzgado Civil y Comercial N° 14, Marcelo Quaglia dictó una medida cautelar contra la entidad crediticia y ordenó suspender los débitos fraudulentos.

El cliente se vio estafado al observar que se le debitaban cuotas de dinero por un préstamo de 610 mil pesos que nunca había solicitado al banco. Esto ocurrió el pasado 19 de abril, por lo que reportó haber sido víctima de una estafa. A pesar del reclamo, el banco continuó debitando el cobro de dicho crédito.

Al momento de dictar la resolución este martes, al rosarino ya le habían sido debitados 342 mil pesos "en concepto de la deuda generada por el préstamo otorgado fraudulentamente", precisaron voceros judiciales.

Para el dictado de la medida cautelar que frenara estos débitos al estafado, "el juez entendió que se daban tres requisitos necesarios: verosimilitud en el derecho, peligro en la demora y contracautela otorgada por el demandante", explicaron desde el Tribunal.

La demanda, en tanto, continuará hasta que el cliente pueda recuperar el dinero perdido por el error en la seguridad informática bancaria.