El cadáver de un hombre fue encontrado este miércoles en un descampado lindero a una distribuidora de galletitas ubicado en Presidente Perón al 6900, en la zona oeste de la ciudad.

Según las primeras informaciones, el cuerpo estaba boca abajo, tenía puesta una capucha y presentaba rastros de sangre en el rostro.

Horas más tarde, la Fiscalía confirmó que se trata de un hombre de 31 años, identificado como Franco Rubén S., cuya data de fallecimiento es de aproximadamente tres días.

A su vez, todos los indicios que manejan los investigadores apuntan a que fue una muerte por causa natural, ya que el cuerpo no presenta golpes ni heridas de ningún tipo, como así tampoco rastros de ahorcamiento.

De igual forma, se confirmó que, al contrario de como se suponía en un primer momento, “el líquido hallado en el cuerpo del fallecido no era sangre, sino líquidos propios del cuerpo expuesto por el paso de los días”.

El cuerpo fue encontrado por personal de la distribuidora y en el lugar se presentaron integrantes del gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones (PDI). La investigación del caso quedó en manos del fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, quien por la tarde brindó una conferencia de prensa desde el lugar de los hechos.

“Los familiares (de la víctima) aseguran que no tenía ningún tipo de vínculo con personas violentas. Ahora estamos tratando de dilucidar cómo fueron las últimas horas de esta persona en vida. El cuerpo tiene manchas de sangre en la cara pero no tiene heridas de ningún tipo", señaló en ese momento Spelta.

Además, agregó: “Lo encontró personal de la distribuidora. Vivía a unas dos cuadras del lugar y estaba desaparecido desde el domingo a la tarde. Tenía billetera con dinero, cigarrillos y cosas personales. No descartamos nada. Hay cámaras de seguridad que ya fueron resguardadas. Cuando tengamos la autopsia vamos a poder afirmar la causa de la muerte”.