El Día del Trabajador es una fecha adecuada para hacer un balance de la realidad del sector y reconocer los desafíos que deben afrontar los sindicatos en el corto plazo.

Mientras por un lado la creación de empleo privado acumuló un crecimiento de 13 meses consecutivos (entre diciembre 2020 y enero 2022); por el otro, en los últimos cuatro años, los trabajadores del sector perdieron un poder de compra que equivale a 6,3 sueldos mensuales. 

Comenzando con el balance positivo, según los registros del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), la creación de empleo privado acumuló un crecimiento de 13 meses consecutivos (entre diciembre 2020 y enero 2022), con tasas que alcanzaron niveles de hasta el 0,5% mensual entre noviembre y enero pasado, debido al proceso de expansión de la economía de los últimos años, indicó un informe del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.

Así, la cartera laboral destacó que "es necesario remontarse hasta 2014-2015 para identificar un periodo equivalente de crecimiento consecutivo del empleo registrado" y que dicho aumento en el empleo privado responde a que "la expansión de la economía está permitiendo concretar una significativa y sostenida mejora de la situación laboral".

Según un informe de la cartera laboral, entre noviembre y enero se verificaron tasas mensuales de crecimiento del empleo registrado del sector privado elevadas en términos históricos de entre el 0,4% y el 0,5%.

De esta manera, en enero de 2022 se incorporaron 29.000 personas al empleo asalariado registrado, mientras que en los últimos tres meses, 80.000 personas accedieron a un empleo formal. Asimismo, en los últimos doce meses se crearon unos 210.000 empleos asalariados registrados en el sector privado.

Por su parte, la industria manufacturera acumula 20 meses de crecimiento continuo de empleo asalariado registrado, aseguró la cartera laboral, donde se crearon puestos de trabajo formales para 54.000 trabajadores.

Asimosmo, el trabajo destacó que entre diciembre de 2021 y enero de 2022 se observó el mayor número de trabajadoras/es registradas/os en el sistema de seguridad social desde que se cuenta con información disponible, a partir de enero de 2012.

Como contrapartida, se acuerdo con un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) la carrera entre salarios y precios en los últimos cuatro años resultó claramente a favor de los segundos.

Durante dicho período, los trabajadores del sector privado formal perdieron un poder de compra el equivalente a 6,3 sueldos mensuales mientras que los que están en el sector informal resignaron 10 haberes.

El reporte del IARAF dice que en los últimos 48 meses, los asalariados formales estuvieron 30 meses en los que sus haberes perdieron contra la inflación, los informales resignaron poder de compra a lo largo de 34 y los empleados públicos durante 33 meses.

Si se incluyen también a las jubilaciones “en el último año, considerado los cuatro sectores poblacionales, percibieron un ingreso inferior en términos de poder adquisitivo al del año tomado como base (febrero 2017-enero 2018)”, señala el informe.

Al comparar los ingresos nominales con la inflación, los sectores más perjudicados serían los trabajadores informales. Estos últimos perdieron 8,5% de poder adquisitivo en promedio por año. Luego, le siguen el sector público con el 6,1% y los jubilados que perciben el haber mínimo con el 5,3% de pérdida promedio anual. Los asalariados formales perdieron a razón de 4,5 puntos a lo largo del período.

Los salarios privados registrados tocaron piso en enero de 2021 con una baja del 18,7% y luego se recuperaron un 3,6% hasta enero de este año. Por su parte, los salarios del sector público se desplomaron 25,3% hasta mayo del año pasado y se recuperaron un 5,8%. Y los salarios del sector privado no registrado se derrumbaron 33,4% hasta septiembre y luego se recompusieron 4,5%