El pequeño Lucas Warren, un bebé de un año con síndrome de Down, fue seleccionado para ser la imagen de la marca de alimentos infantiles Gerber, una compañía estadounidese tradicional, propiedad del grupo Nestle desde 2007, que alberga esta costumbre desde hace ya ocho años. 

Año tras año la compañía selecciona un niño que considera representa la herencia de los valores de Gerber y “este año, Lucas encaja perfectamente”, según explicó en un comunicado el presidente y CEP de Gerber, Bill Partyka. La novedad es que el pequeño tiene síndrome de down, algo inédito entre los nenes seleccionados.

“La sonrisa entrañable de Lucas y su expresión alegre se ganaron nuestros corazones este año”, agregó Partyka al presentar la foto del pequeño que, sentado en una butaca marrón, vestido con una camisa verde, pajarita y agarrando el bajo de su pantalón blanco, ríe desinhibido mirando a cámara.

Se trata de la primera vez que un niño con síndrome de Down representa a la marca, cuyo logo original es el boceto de un retrato de un bebé y que desde hace ocho años celebra este concurso. La instantánea fue seleccionada de entre más de 140.000 y representará a la compañía durante 2018 en sus redes sociales.

La familia de Lucas, residentes en Dalton, Georgia (EE UU), recibirá una retribución de 50.000 dólares, pero para su madre, Cortney Warren, lo más importante es que “esta oportunidad arroje luz sobre la comunidad con necesidades especiales”  y “eduque a las personas en que con aceptación y apoyo, los individuos con necesidades especiales tienen el potencial de cambiar el mundo, ¡como nuestro Lucas!”, agregó su madre.