Maximiliano Lovera, de 20 años, demostró en las últimas semanas que con algo de continuidad puede darle mucho al ataque de Rosario Central. Sus recientes actuaciones le sirvieron para ganarse un lugar importante en la consideración de Diego Cocca y, a la vez, llamaron la atención de otros clubes.

Para el mediapunta, que debutó hace tres años en la primera de Central, los minutos que el entrenador le brindó en el último tramo del semestre fueron fundamentales. Después de navegar por varios puestos de la cancha (llegó a jugar incluso como volante externo), Lovera encontró su lugar como una opción detrás del centrodelantero. En el contexto de un equipo al que le faltó fútbol, el pibe mostró velocidad y gambeta.

Este viernes su representante, Ricardo Schlieper, admitió que varios clubes consultaron por Lovera aunque ninguno presentó una oferta formal. El propio agente descartó los rumores que hablaban de un posible pase al Galatasaray de Turquía, tal como publicaron medios europeos.

"Sería muy bueno que sigue un tiempo más en Rosario Central, encontró un entrenador que lo va a utilizar y eso en el futuro lo puede llegar a favorecer", opinó el empresario sobre el futuro inmediato del joven surgido de las inferiores auriazules.