Central, que ganaba 3 a 1 con una primera parte estupenda, perdió 4 a 3 ante Racing, en un partido que Emiliano Vecchio fue la figura ingresando en el segundo tiempo.

Buonanotte la rompió toda, pero el equipo no lo acompañó en la segunda mitad. Fatura, que se comió el empate, sostuvo todo lo que pudo a un Central que pierde el partido por inocente.

El primer tiempo del partido se dividió en dos partes: durante los primeros minutos, Racing insistía un poco más, e hizo replegar al equipo de Tévez en los primeros instantes, pero luego del gol, los rosarinos reaccionaron y se adueñaron del encuentro.

Los de Gago tuvieron premio rápidamente, ya que después de un rebote en un córner, Juan Rodríguez quiso despejar, lo hizo mal y la pelota dio en Alcaraz que, sin querer, puso el 1 a 0.

Después de eso, todos los minutos fueron del Canalla. De a poco, el conjunto de Arroyito fue ganando metros en el campo y empezó a inquietar a Arias, que respondió bien en las primeras.

Central llegó al empate con la misma fórmula de todo el campeonato: los centros de Blanco. El defensor, que este viernes jugó de volante, se la puso en la cabeza a Almada, que le reventó el arco al arquero chileno para poner las tablas.

Con el envión del empate, el Canalla tardó apenas cinco minutos para ponerse arriba en el marcador: Blancó, nuevamente, asistió a Buonanotte en una contra, y la joya definió por arriba de Arias.

El resultado, justo por lo que pasaba en el campo, no hizo que Central se repliegue, sino todo lo contrario. Los de Tévez siguieron insistiendo y tuvieron su premio. En otra jugada por izquierda, la pelota le quedó a Infantino, que centró y encontró a Véliz, y quien había perdido una clara minutos antes, de cabeza, puso el 3 a 1 en el marcador.

Un recital de Facundo Buonanotte hizo que los rosarinos se adueñen completamente de una primera parte extraordinaria.

A los pocos minutos del comienzo de la segunda etapa, se veía venir lo que iba a ocurrir instantes más tarde. Con garra, ganas y personalidad, los de Gago se llevaron por delante a un Central que cometió el error de tirarse atrás.

El ingreso de Emiliano Vecchio le dio vida a la Academia, que en tres minutos descontó y empató el encuentro. Primero por un golazo del ex Central y luego con una mala salida de Broun que aprovechó Romero.

Con el empate parcial, los de Tevez comenzaron a sufrir, y se salvaron de la rotura del empate por un Broun que, a pesar del error grosero, sostuvo todo lo que pudo a su equipo.

Central, desorientado y sin ideas, dependía de alguna contra aislada que jamás llegó. Además, contaba con un Buonanotte extenuado, que era el único capaz de sacar ventaja en ataque.

Y cuando todo parecía culminar el empate, una vez más, el Canalla pecó de inocente. Mac Allister, de flojísimo partido, rechazó una pelota fácil al córner y de ahí, Racing jugó rápido, Central durmió, y Aníbal Moreno aprovechó para, de cabeza, definir el partido.