Newell's recibió un cachetazo de local con un Independiente incontrolable en el ataque. Quizás la defensa fue el punto más débil del equipo leproso aunque nunca logró agarrar la manija del partido en la mitad de la cancha. Mucho tuvo que ver la lesión de San Román y las modificaciones tácticas que ocasionó.

Luciano Pocrnjic: de los cuatro goles que recibió, quizás en el tercero pudo haber salido. No tuvo responsabilidad en los otros.

José San Román: jugó apenas diez minutos porque sufrió un esguince de rodilla y tuvo que dejar la cancha. Más que en duda para el clásico.

Sebastián Domínguez: le costó lidiar con la velocidad de los delanteros de Independiente. Tuvo problemas para despejar, como en el cuatro gol, cuando cabecea sobre el cuerpo de Gigliotti, que después definió gambeteando a Pocrnjic.

Néstor Moiraghi: paradójicamente fue el mejor de un equipo al que le hicieron cuatro goles. Cubrió las espaldas de sus compañeros y abortó algunos avances que prometían peligro.

Nehuén Paz: tuvo mala fortuna cuando el remate de Fabricio Bustos se desvió en él y descolocó a Pocrnjic. Rigoni le ganó siempre en velocidad.

Juan Ignacio Sills: jugó casi todo el partido de lateral derecho. No tuvo una buena tarea intentando controlar a Ezequiel Barco.

Facundo Quignón: quedó como volante de contención ante la salida de San Román. Le ganaron las espaldas en muchos momentos. El mejor momento de Newell’s en el partido coincidió cuando agarró la pelota.

Joel Amoroso: arrancó bien pero su tarea se fue diluyendo entre malas decisiones. Osella volvió a reemplazarlo. Ya no alcanza con el esfuerzo que hace para cubrir toda la banda ni la ayuda que ofrece en el retroceso.

Mauro Formica: fue participativo en el arranque pero después se apagó. El equipo no lo supo encontrar. Levantó algo en el complemento pero no alcanzó para contagiar al resto.

Maxi Rodríguez: apareció a partir de los 30 minutos cuando bajó la intensidad del partido y Newell's la hizo circular un poco. Descontó en el final, en un gol que sólo sirve para la estadística.

Ignacio Scocco: derechazo fulminante en el penal del empate transitorio. El equipo lo buscó en la pelota larga y no tanto por abajo. Tuvo una en el final del primer tiempo pero no le pudo dar buen destino al cabezazo.

Víctor Figueroa: ingresó a los diez minutos y se paró junto a Facundo Quignón. Intentó hacerse de la pelota pero no estuvo preciso en los metros finales.

Eugenio Isnaldo: entró bien. Aunque perdió alguna pelota por querer encarar en inferioridad numérica, le metió mucha intensidad y resolvió bien cuando llegó al fondo.

Sebastián Prediger: como siempre, entró en el final cuando el partido estaba resuelto.