Los vecinos del Fonavi de Seguí y Rouillón siguen muy preocupados. Hace pocos días lograron que la concejala Celeste Lepratti presentara un pedido de inspección en carácter de urgencia ante el riesgo de derrumbe de varias escaleras del complejo edilicio que, aseguran, se encuentra en muy malas condiciones.

Al margen de la movida en el Concejo, los habitantes del barrio vienen reuniéndose en asambleas, con una comisión de alrededor de 120 vecinos que no cesan de reclamar por lo que consideran un riesgo permanente. "Hace un año y medio que venimos reclamando pero nos patean las soluciones", se quejó Rita, vecina del Fonavi, en diálogo con Rosarioplus.com.

Según la asambleísta, concurrieron tanto a la Dirección Provincial de Vivienda y a la Municipalidad, y en ningún caso obtuvieron respuestas. "Se van pateando la responsabilidad de gobierno a gobierno y no hacen los arreglos, ellos sólo quieren tratar de que no hagamos ruido".

Rita precisó que hay unas 66 escaleras en todo el complejo habitacional, y que muchas de ellas están en muy mal estado y con riesgo de derrumbarse. "Nosotros tratamos de mantenerlas, pero hay trabajos que un vecino no puede hacer", indicó. 

Por eso, el reclamo hacia Provincia y municipio es que, al menos, envíen inspectores que puedan precisarle a los vecinos si efectivamente las escaleras corren riesgo de derrumbarse. "Queremos que vengan y nos digan si estamos en peligro", sentenció Rita.

El próximo viernes, por gestiones del edil Diego Giuliano, los vecinos concurrirán a una reunión en el Concejo, donde insistirán con su reclamo. Ese mismo día, pero un rato antes, volverán a la sede de Vivienda para pedir nuevamente ser atendidos y obtener alguna respuesta a un reclamo que acumula meses pero carece de soluciones.