El Gobierno nacional habilitó los eventos religiosos en iglesias y lugares cerrados respetando, como máximo, un aforo del 30 por ciento en zonas de alarma y de alto riesgo epidemiológico y sanitario por el coronavirus.

A los pocos minutos de publicada la medida en el Boletín Oficial , el gobernador Omar Perotti adhirió y dispuso esa habilitación en territorio provincial, no así con las actividades de salas de cine y teatro que Nación habilitó al mismo tiempo que las actividades religiosas. 

La medida nacional se adoptó tras evaluar un pedido de los diferentes credos ante la Secretaría de Culto, que conduce a Guillermo Oliveri, quien tramitó la solicitud ante la Jefatura de Gabinete. 

Según el decreto provincial, se podrá ir a los templos de 9 a 19. Los participantes deben asistir con tapabocas, mantener el distanciamiento social, cuidar el lavado de manos, mantener la sanitización del lugar y tener disponible alcohol en gel.