La familia del conductor que en una camioneta atropelló y mató a los dos jóvenes que le habían robado poco antes, en el barrio de Fisherton, teme regresar a su domicilio. Así lo reveló este viernes su abogado, Pablo Rajmil, quien pretenderá demostrar en la audiencia que se hará este domingo que su defendido actuó bajo una emoción violenta y que las dos muertes fueron resultado de “un exceso en su legítima defensa”. Desde Fiscalía se confirmó que fue solicitada custodia para el núcleo familiar del imputado.

El autor del doble homicidio con su camioneta está ahora en prisión preventiva. Aunque, como afirmó su abogado en declaraciones a Telefe Rosario, al no tener antecedentes penales y haber demostrado predisposición con la Justicia, podría salir en libertad a la espera del juicio.

El conductor llegó a su casa en Amuchástegui al 600 luego de haber hecho una operación financiera. “Estacionó la camioneta en la puerta y bajaba para abrir, cuando fue abordado. No sabemos si fue producto del azar o si lo venían siguiendo después de haber cobrado la plata que tenía en el bolso. Ahora su familia tuvo que dejar su casa, en la zona oeste, porque están atemorizados. Ayer, en el lugar del hecho y también en la Comisaría, hubo personas que le han propinado amenazas a mi defendido”, explicó Rajmil. Apenas conocida la noticia del choque, se hicieron presentes los medios de prensa. Y los familiares del primero de los jóvenes que murió atropellado que estaban en el lugar, agredieron a fotógrafos y cronistas.

Según se informó desde el Ministerio Público de la Acusación, la audiencia se realizará el próximo domingo y la mecánica del hecho se encuentra en investigación. Por un lado, se investiga el robo. Y por otro, el posterior choque y las dos muertes, una de ellas inmediata y la otra en la mañana de este viernes. Los fallecidos son Diego García Quiroga, de 25 años y Luciano Escudero, de 29. El conductor de la Chevrolet S10 que los persiguió tiene también 25 años.