El lunes pasado, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 6 de la Capital Federal sentenció a ex funcionarios y policías por la represión ocurrida lo días 19 y 20 de diciembre de 2001. El fallo dejó a algunos con sabor a poco. Para Celeste Lepratti, concejal rosarina y hermana de Pocho, “todavía no se rindieron cuentas por la sangre derramada en aquel terrible genocidio”. En la provincia de Santa Fe, donde se registraron nueve víctimas fatales, la Justicia no llega.

"Crece la impunidad para los de arriba. El propio brazo ejecutor de la masacre, la Policía, también se ve beneficiada con el fallo. No teníamos demasiadas expectativas en la sentencia. Es un cachetazo más", analizó la edila por el Frente Social y Popular y presidenta de la comisión de Derechos Humanos en diálogo con Rosarioplus.com.

Como tantos otros familiares de los fallecidos y heridos hace casi 15 años, Lepratti se preguntó “por qué en Santa Fe ningún juez creyó necesario citar a Carlos Reutemann” y comparó la situación con lo que ocurre a nivel nacional con Fernando De La Rúa, “cada vez más lejos de una sentencia”.

"Seguiremos por las pocas vías que quedan dentro de lo institucional, en este caso en la órbita internacional, presentando el conjunto de causas por las víctimas fatales y todos los atropellos vividos en nuestro país en aquellas jornadas”, concluyó la hermana de Pocho.

La mirada desde la provincia

El subsecretario de Derechos Humanos de Santa Fe, Ramón Verón, entendió el fallo del pasado lunes como “un buen síntoma y una auspiciosa señal”. Sin embargo, en sintonía con Lepratti, espera que la Justicia llegue al territorio provincial.

“Pasaron cerca de 15 años y empieza a verse algo de justicia. Que esta sentencia sea el comienzo para que todos los culpables de los asesinatos en esas dramáticas fechas cumplan condena, tanto materiales como intelectuales”, deseó Verón.

El funcionario remarcó que “en Santa Fe también esperamos justicia por los asesinatos cometidos. Aquí hay personas que deberían dar explicaciones en la justicia”. Desde finales de 2001, las familias de Gianina García, Graciela Acosta, Juan Alberto Delgado, Rubén Pereyra, Walter Campos, Ricardo Villalba, Graciela Machado, Claudio “Pocho” Lepratti y Marcelo Passini reclaman lo mismo.