Denis y Adriana intentaban consolarse mutuamente. Son el novio y la madre de Georgina (20 años), la chica que falleció este miércoles por las múltiples heridas sufridas tras caer al vacío de un séptimo piso en pleno barrio Martin al pasar de un balcón a otro. El accidente se produjo en su afán de acceder a su departamento tras advertir que se había olvidado las llaves. "Nunca lo había hecho, no entendemos por qué decidió trepar", maldecían sus familiares en la sala de espera del Heca, antes del lamentable desenlace.

Denis tiene un poco más de fuerza para contar lo que pasó. Adriana escucha en silencio y se quiebra al reconstruir el accidente. Georgina llegó a Rosario hace algunos meses para estudiar instrumentación quirúrgica. Es oriunda de Villa Cañás, localidad del departamento General López, a 180 kilómetros de nuestra ciudad. Se instaló sola, aunque pasaba casi todo el tiempo junto a Denis, un joven radiólogo del hospital Provincial.

Esta mañana, recibió la visita de una amiga de su madre, quien viajó hasta Rosario para comprar telas para su negocio. Tomaron unos mates y bajaron para comenzar con la recorrida. Ya en el palier, la joven se dio cuenta que se había olvidado las llaves. "Ahora vuelvo, vos quedate acá", le dijo a su acompañante.

A los pocos minutos, la mujer escuchó un fuerte golpe. Se acercó hasta la puerta de entrada del edifico y a través del vidrio vio que Georgina estaba tirada en el piso. Al instante, un vecino bajó y abrió la puerta. Un médico que pasaba por la calle la auxilió. Con su teléfono celular llamó a la ambulancia.

"Llegó consiente y hablando, luego la internaron. Los médicos nos dicen que hay que esperar", explicaba el novio. En el trayecto al hospital, Georgina contó que la chica del séptimo la dejó pasar y que pensó que podía trepar sin problemas. "Uno ve la distancia y parece fácil. Parece que algunos vecinos lo hacían. Pero nunca lo tendía que haber intentado", agregó la madre en pleno llanto.

Denis no entiende cómo su novia no lo llamó para comentarle el inconveniente. "Siempre que tenía algún problema en el edificio me llamaba y yo me acercaba para ayudarla. Hoy no lo hizo, me tendría que haber llamado", se lamentaba. Él fue el primero en llegar al Heca. Horas más tarde arribó Adriana. Viajó ni bien se enteró de la noticia.

Por la noche, se confirmó el peor desenlace: Georgina falleció producto de múltiples traumatismos y heridas en diferentes órganos. "Siempre estuvo muy grave", aclararon desde el Heca, al tiempo que remarcaron que la hora del deceso fue 17:30