El reempadronamiento obligatorio de titulares de locales comerciales que venden productos pasibles de tener alguna relación con el delito generó polémica en algunos de los sectores que se vieron involucrados en la medida municipal.

El titular de la armería El Sendero, Ricardo Brachetta, calificó a la medida como innecesaria y afirmó que el sector está "totalmente controlado".

"El problema de la inseguridad no está en las armerías, nos quieren estigmatizar con que le vendemos armas a los delincuentes, y la verdad es que ninguno de esos vienen a comprarnos a nosotros", señaló el comerciante, en diálogo con Rosarioplus.com.

Según explicó Brachetta, para tener una armería, el titular debe ser legítimo usuarios, por lo tanto no cuenta con antecedentes penales. También, los locales están sujetos a una inspección periódica del AnMac (ex Renar) y el CREAR (Control regional de Armas) que verifican las municiones y los libros de ventas".

"El AnMac (ex Renar) ya tiene toda la información de las armerías. Además, contamos con cámaras de vigilancia y bóveda, como se nos exigió en su momento", comentó el propietario de El Sendero y agregó: "Para vender un arma, los movimientos se tienen que registrar sí o sí".

En cuanto a la medida impulsada por el municipio, el comerciante señaló: "Tienen que mostrar que hacen algo para que la gente vea qué es lo que está pasando".

"La inspección municipal sirve para saber si el local está en condiciones, pero a la Municipalidad no le importa qué tipo de arma querés vender", agregó.

Este lunes se abrió el plazo para el reempadronamiento obligatorio de titulares de locales comerciales, industriales o de servicio que puedan tener alguna vinculación con economías delictivas. La medida, anunciada por la intendenta Mónica Fein, rige hasta el mes próximo, y se llevará adelante en el marco de una serie de iniciativas implementadas por la Municipalidad con el objetivo de contribuir a la mejora de la seguridad en la ciudad.

Además, Brachetta se refirió a los planes de desarme que se realizaron en el país: "El desarme voluntario sirvió para entregar fierros viejos, las armas del delito no se entregaron". "Tendría que haber un reempadronamiento gratuito de armas, para saber cuántas hay en circulación", sugirió el armero.