El comisario general retirado Osvaldo Bejarán comenzó este lunes en Rosario el juicio oral que lo tiene como imputado de enriquecimiento ilícito durante su desempeño como autoridad de la Policía de Santa Fe.

Bejarán trabajó en diversos destinos, Rosario entre ellos, y se retiró en 2008 como jefe de la Unidad Regional X, del departamento Iriondo. Lo juzga el tribunal integrado por Valeria Pedrana, Hebe Marcogliese y Héctor Núñez Cartelle.

El fiscal Gonzalo Fernández  Bussy, de la Unidad de Violencia Institucional, lo acusó por el delito referido y pidió la pena de 3 años de prisión efectiva.

La imputación penal sostiene que Bejarán incrementó de manera injustificada su patrimonio. A partir del año 2001, comenzó a cumplir funciones como jefe de las División Leyes Especiales y en 2 años comenzó el aumento infundado de su bienes registrables, informaron desde el Ministerio Público de la Acusación. En el año 2003 adquirió una licencia de taxi en conjunto con un Fiat Siena y en mismo año adquirió un Chevrolet Corsa 0 km. Así también en 2004 compró una finca y otro vehículo marca Renault, todos bienes conseguidos con un único ingreso como personal policial.

Bejarán pasó por distintas jerarquías policiales desde el año 1978, en el que ingresó a la fuerza, hasta el año 2008, cuando se retiró como Comisario General de la URX Iriondo.

El comisario mayor retirado Osvaldo Raúl Bejarán, que prestó servicios en la fuerza de seguridad provincial entre los años 1978 y 2008, quedó a un paso de enfrentar un debate bajo acusación de enriquecerse de manera ilegal: esta semana se realizó una audiencia preliminar donde el fiscal Gonzalo Fernández Bussy adelantó que pedirá una condena de 3 años de prisión, inhabilitación perpetua para el ejercicio de cargos públicos y una multa del ciento por ciento del valor del enriquecimiento.

Por un informe de la Secretaría de Control de Seguridad de la ex División Judiciales, que data de 2009, se inició una investigación administrativa contra el retirado comisario mayor Osvaldo Raúl Bejarán que derivó en una investigación judicial en el viejo sistema penal santafesino.

El uniformado ingresó a las fuerzas de seguridad en febrero de 1978 y se retiró en septiembre de 2008, plazo en el que tuvo dos matrimonios. Tras una larga instrucción, el uniformado fue procesado en 2016 por la entonces jueza Alejandra Rodenas, luego de que un peritaje determinara que sus ingresos no eran compatibles con su patrimonio.

En octubre de 2018 se puso fin a la tramitación de causas con base en la vieja normativa procesal y todas las causas pasaron al nuevo sistema penal. Una de ellas fue la de Bejarán, que quedó en manos del fiscal Fernández Bussy.