Una mujer de 32 años denunció este viernes que recibió amenazas por parte de un desconocido, que le exigió que deje su casa, "por las buenas y por las malas". La mujer vive en el barrio Moreno, una zona humilde y periférica de San Lorenzo y, según trascendió, le dijeron que tenía que dejar su propiedad, asegurando que "no tienen nada que perder, que vienen a ganar". En la denuncia, la vecina dice temer por su integridad y la de su familia y aseguró que es la misma metodología que usan las bandas en la ciudad de Rosario. 

Según la denuncia que efectuó la vecina de San Lorenzo, este jueves a eso de las 22 se presentó una persona en su domicilio asegurando ser de la zona sur de Rosario. Decía que le había comprado la propiedad a la propietaria de la casa, recientemente fallecida. La mujer le preguntó a quién y cómo habían comprado la casa y el hombre le respondió que se tiene que ir "por las buenas o las malas", que no tienen "nada que perder" y que vienen (a San Lorenzo) a "ganar". La denunciante aseguró que lo mismo le dijeron a una chica que vive en un pasillo ubicado detrás de su casa.  Las dos fueron amenazadas con tener que dejar su casa entre viernes y sábado "o las iban a sacar por las malas". 

"Temo por mi integridad física y la de mi familia", puntualizó la mujer y comparó las amenazas recibidas con la metodología que utilizan bandas narcos en Rosario para usurpar viviendas. Según informó, la persona que efectuó las amenazas estaba en un auto Peugeot color negro, y en el interior lo esperaban tres personas más. También lo acompañaba un Peugeot blanco, con cuatro personas en su interior. Los dos automóviles tenían vidrios polarizados. 

El concejal sanlorencino Marcelo Remondino dijo a RosarioPlus.com que estas cosas "no pasan en San Lorenzo" y aseguró que el barrio se movilizó y está en alerta para evitar que se instalen búnkers. "Los vecinos están muy preocupados", subrayó. Remondino no sólo acompañó a la vecina a realizar la denuncia correspondiente en la comisaria, sino que también puso al tanto de la amenaza a la fiscalía provincial y federal y al secretario de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni.