Un hombre salvó su vida este lunes de madrugada entre las llamas de un incendio que ahora se investiga si fue intencional o no, pero perdió todo lo que de valor había en su vivienda de barrio Ludueña, además de su auto, estacionado en el garaje y que habría sido el origen del fuego. El siniestro también afectó la vivienda lindera de una familia que también tuvo un despertar de sobresalto.

Una dotación de Bomberos Zapadores y otra de Bomberos Voluntarios debieron acudir pasadas las 3 de la mañana con premura hasta el pasaje Damianovich al 6100 (Vélez Sarsfield y Garzón) para sofocar el fuego que a esa altura hay se había apoderado de una vivienda.

Las lenguas de fuego comenzaron desde el Citroën C3 estacionado en el frente y tomaron la galería y las dos habitaciones delanteras, ambos dormitorios. Además, ya el siniestro empezaba a extenderse a una vivienda contigua.

Al cabo de una hora de faena con sus mangueras, los bomberos lograron controlar el incendio y evitar que se propagara aún más. Luego de sofocar las llamas, les llevó un buen rato lograr el enfriamiento de la mampostería para terminar de extinguir el foco. 

El fuego derribó un tinglado de chapa que hacía las veces de galería frontal de la casa, y arrasó con muebles y ropa del dueño de casa, un hombre de 39 años que alcanzó a salir a la calle y evitar una muerte segura. A la casa del vecino el fuego le calcinó la galería hecha con tirantes de madera.

 Iván, el hombre de la casa contigua, explicó: "Se prendió el auto del vecino y de ahí pasó a mi casa", dijo a la prensa. En la casa estaba él, su esposa y sus cuatro hijos.

Para colaborar se puede escribir al número de Valeria, su esposa: 341 3 48 77 92  o hacer transferencias al CBU: 1430001713020140320011