A días del ataque de Hamas, Israel acentúa hora a hora su contraofensiva y este lunes ordenó un “cierre completo” de la Franja de Gaza, impidiendo el ingreso de agua, alimentos, electricidad, combustibles y suministros para sus casi 2 millones y medio de habitantes, al mismo tiempo que redobló sus bombardeos contra Palestina, incluso matando a cuatro rehenes civiles de su propio país en esos ataques.

En el anuncio de esta medida, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, declaró que luchan "contra animales humanos" y que actuarán "en consecuencia", frase que valió el repudio de algunos sectores de la comunidad internacional. El primer ministro, Benjamin Netanyahu, por su parte señaló que “Medio Oriente cambiará para siempre”.

Luego de que más de 700 israelíes perdieran la vida y otros 2.150 resultaran heridos tras la embestida del sábado de la organización islamista, el Ejército de aquel país anunció este lunes haber retomado el control de las localidades del sur que habían perdido, aunque siguen buscando milicianos en aquellas zonas.

Mientras tanto, las cifras oficiales de Palestina señalan que unas 560 personas murieron y otras 2.900 resultaron heridas en los bombardeos a Gaza, que tuvieron algunos objetivos también polémicos como una mezquita, escuelas de la ONU, hogares y edificios residenciales. Mientras tanto, 123.000 palestinos tuvieron que dejar sus hogares.

Israel, que también lanzó el despliegue de decenas de miles de soldados sobre la Franja de Gaza, mantiene un bloqueo sobre dicho enclave desde 2007, momento en que Hamas tomó el control político.

A raíz de esto, la organización yihadista islamista aseguró que el ataque se debió al hartazgo por este bloqueo, por la ocupación militar y la colonización israelí de Cisjordania y Jerusalén este (territorios que los palestinos reclaman para fundar su Estado), como así también de las continuas incursiones militares y detenciones de palestinos en ciudades cisjordanas y en sitios sagrados islámicos de Jerusalén.

Israel lanzó 500 bombardeos contra Gaza solamente en la noche del domingo y otros 1.000 el sábado.

Además, este lunes se informaron ataques en la zona de Alta Galilea, en lo que serían misiles provenientes desde el Líbano, territorio donde opera Hezbollah.