El federalismo tan mentado por el gobierno nacional acaba de quedarse en palabras. En medio del conflicto con los choferes de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) de todo el país, el Gobierno volvió a decidir entre ciudadanos de primera y de segunda al asegurarle el incremento a los choferes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y no a los del interior. Así, no habrá paro en Buenos Aires, pero sí en el interior.  

Antes esto, la UTA resolvió levantar el paro de colectivos en el AMBA debido a que "han otorgado los incrementos salariales pedidos únicamente para los trabajadores" de ese área, pero no en el resto del país, incluido Rosario que el lunes aumentó el boleto. 

“Únicamente se procederá a dejar sin efecto la medida de acción gremial en aquellas provincias en que se cumplimente con el incremento salarial proporcional en los mismos términos y condiciones que las resueltas para el AMBA”, resolvió el gremio. 

El ministerio de Transporte de la Nación comunicó sobre el filo de la medianoche que en el AMBA “se aseguró el pago de los salarios y los servicios de transporte automotor que son de jurisdicción nacional, levantándose así el paro de mañana. Los fondos serán aportados por el gobierno nacional a las empresas de transporte para afrontar salarios”. Más clarito echale agua.

Para el interior ratifican “el pago del fondo compensador dispuesto por la ley de presupuesto, según la rendición de cuentas que hace cada provincia”. Lo que corresponde sin esfuerzos extras. 

Los dirigentes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) se despegaron del problema. "La situación afecta a 10 millones de usuarios de forma diaria en el AMBA y a 9 millones en el interior del país, por lo que de producirse la huelga será exclusiva responsabilidad del sector empresario, de las máximas autoridades de las carteras de Transporte de la Nación y de las provincias y del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires", puntualizó.

Hubo críticas de algunos dirigentes ante la discriminación en la decisión de abonar los incrementos. Fue el caso de la concejala Verónica Irizar que escribió en su cuenta de Twitter: “La discriminación es evidente. El federalismo no es solo una declaración de principios, se practica con distribución de recursos. No tienen vergüenza. Y eso que Diego Giuliano es de Rosario”