En épocas de alta inflación y sueldos que no alcanzan para adquirir bienes como una casa o un auto, la gastronomía parece la alternativa más cercana a darse un lujo. En Rosario, la imagen de bares llenos y las demoras a la hora de sentarse en un lugar, se convirtieron en moneda corriente ¿Le alcanza al rubro para hacer la diferencia?  

Desde el sector hotelero gastronómico, convalidan la constante concurrencia de las y los rosarinos, aunque también insisten con las dificultades que genera la alta inflación a la hora de establecer la relación entre los costos y las ganancias.

Esta semana el presidente de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica de Rosario (Aehgar), Alejandro Pastore, dialogó con Si 98.9, e hizo un análisis al respecto: “La inflación genera una dispersión total de precios y pérdida de referencia, no sabemos a cuanto hay que reponer la mercadería. No podemos trasladar todos los aumentos a la carta ya que eso se hace mensualmente, pero en el medio los aumento de precios son semanales y eso genera pérdida de rentabilidad”.

Más allá de esta dificultad, el referente gastronómico vio el vaso medio lleno y a su vez destacó: “Tenemos una ciudad preparada para disfrutar la oferta. Tenemos kilómetros de costa para vivir en el espacio público. Hay centros comerciales abiertos, el centro se revitalizó, es una ciudad para vivir puertas afuera. Si el contexto ayuda, rápidamente podemos recuperar nivel”.

El último relevamiento del sector, que data del 2022, indicó que la oferta gastronómica rosarina “está consolidada”, con 1750 establecimientos y casi 180 mil cubiertos, entre todos los establecimiento. Ya desde ese entonces, la oferta ya había mejorado respecto de la pandemia, por lo que esperan que el próximo censo, que será próximamente, arroje mejores resultados aún.

Por otra parte, Pastore destacó nuevos hábitos entre los rosarinos y explicó: “Hay cada vez más propuestas específicas. Hay crecimiento de establecimientos con menos cantidad de cubiertos, pero con especificidad, eso redunda en calidad. Igualmente para nosotros la relación precio calidad está conservada”.

Para finalizar, se refirió a la evolución del empleo en el sector y a los niveles de registración: “Es un sector que genera mucho empleo, está el mote de empleo precario, pero en la provincia hay 20 mil trabajadores vinculados al sector. Habrá casos de mala registración como sucede en otros rubros, pero sabemos que la gastronomía emplea mucha gente”.