Marcelo Diez, el joven neuquino que permanecía desde hace 20 años en estado vegetativo sostenido por elementos artificiales, murió por causas naturales a las 18.30, cinco horas después de conocerse el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que autorizaba a desconectarlo de los aparatos que lo mantenían con vida. 

"Su último gran regalo fue que primero la Corte emitiera su fallo, ya que de otro modo, de haber fallecido primero, la causa entabalda por los familiares se hubiera declarado abstracta", dijo a Télam Lucas Pica, abogado de la familia.

​Marcelo Diez murió en el Centro Médico Cemic de la capital neuquina luego que la Corte emitiera por primera vez un fallo reconociendo la muerte digna, aplicando la ley nacional sancionada hace tres años.