Julio César Toresani, aquel volante derecho que jugó en Unión, River y Boca, entre otros clubes durante los '80 y '90, murió este lunes en un predio de la Liga Santafesina de Fútbol, y los primeros indicios apuntan a un suicidio. Eso, y el dato de que el ex futbolista atravesaba dificultades en lo económico y en su vida familiar. En consecuencia, sufría una crisis depresiva que ya se había manifestado la semana pasada, cuando fue atendido en el hospital Cullen, de la ciudad de Santa Fe, luego de un aparente intento de suicidio.

Tenía 51 años y en el ambiente futbolístico se lo conocía con el apodo de Huevo. Su ex esposa lo había denunciado tiempo atrás por violencia de género, al punto de que pesaba sobre él una orden judicial que le impedía acercarse a la mujer. En 2013 superó un cáncer en los ganglios linfáticos. "Me aferré a mi familia y a Dios. Soy muy creyente y recé mucho. Dios es grande y existe. Estaba en sus manos y en las del médico", dijo en su momento, al diario Olé.

Toresani había surgido de las divisiones inferiores de Unión. En 1986 debutó en primera, siguió por Instituto de Córdoba, River, Colón, Boca, Independiente, Audax Italiano (Chile) y Patronato de Paraná. Se retiró en 2004.

Su carrera siguió como entrenador de San Martín de San Juan, Colón, Aldosivi, The Strongest, Sportivo Italiano, Deportivo Madryn, San Martín de Mendoza, Textil Mandiyú, Liga de Loja, Sportivo Italiano, Real Potosí, Sportivo Patria, Orense y Rampla Juniors.

Un episodio recordado en la trayectoria de Toresani fue la pelea que mantuvo con Diego Maradona, en los '90, vistiendo la camiseta de Colón, cuando el Diez volvió a jugar en Boca. "A mí me echó Maradona. Y lo que diga Maradona cuando escuche esto, no me importa un carajo. Pero quisiera tenerlo de frente para ver si me dice las cosas que me iba a decir, que me iba a agarrar afuera. Está bien, yo me la banco: lo iría a buscar a la casa", dijo Toresani al final del partido luego de haber sido expulsado por participar de un tumulto.

Y Maradona contestó, como no podía ser de otra manera: "A Toresani le dije que vivo en Segurola y La Habana 4310 séptimo piso. No tengo ningún problema en que me venga a buscar. Estoy cansado de los del pico, que de acá son todos guapos, pero cuando hay que poner la cara quieren separar. Que le pregunten a Lamolina a ver si tiene cara. A Toresani, lo vuelvo a repetir: Segurola y La Habana 4310 séptimo piso, y vamos a ver si me dura 30 segundos".

Todo quedó en eso, incluso al año siguiente Toresani pasó a Boca y compartió equipo con Diego.