El británico Andy Murray alcanzó por tercera vez la final e irá por su segundo título de campeón de Wimbledon, tras vencer con autoridad al checo Tomas Berdych por 6-3, 6-3 y 6-3 en una hora y 58 minutos. El escocés ya fue campeón en el césped inglés en 2013, cuando puso fin a una racha de 77 años sin campeón británico en la catedral del tenis.

En la final deberá enfrentar al sorprendente canadiense Milos Raonic, quien se deshizo de Federer en un épico duelo de tres horas y 25 minutos, por 6-3, 6-7 (3), 4-6, 7-5 y 6-3 para convertirse en el primer canadiense en lograr la final en el cuadro masculino.

Murray y Raonic se enfrentaron en nueve ocasiones, con 6 triunfos para el escocés y 3 para el canadiense. A su vez, será la undécima final de un Grand Slam para Murray (Abierto de EE.UU. 2008 y 2012, Abierto de Australia 2010, 2011, 2013, 2015 y 2016, Wimbledon 2012 y 2013, y la más reciente en Roland Garros 2016).

Con la de este domingo, Murray igualará con el sueco Stefan Edberg, el australiano John Newcombe y el estadounidense Andy Roddick, en la décima plaza de jugadores que más veces han jugado una final en el All England, desde que dio comienzo la Era Open.

Por su parte, Milos es ya el primer jugador no europeo en alcanzar esta final desde el estadounidense Andy Roddick en 2009. Seis participaciones en el All England le ha costado al canadiense lograr la final, e igualar con su compatriota Eugenie Bouchard, que lo hizo en la femenina, de hace dos temporadas. Se ha convertido, además, en el más joven en lograr la última ronda, con 25 años y 196 días, después de Murray en 2012, con 25 años y 54 días.

Federer, ganador siete veces del título, nunca había perdido en las semifinales de este torneo hasta este viernes. Pero su físico, después del duelo de cuartos contra el croata Marin Cilic, también en cinco sets (tres horas y 17 minutos) ante quien salvó tres bolas de partido, le pasó factura.