La noticia pasó desapercibida entre tanto debate que ocupó el futuro de la concesión del estacionamiento medido, finalmente prorrogada por un año, la exención de impuestos al teatro independiente y la ayuda a clubes de barrio, entre varios temas. Pero en tiempos en los que el costo del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) está en la lupa de oficialistas y opositores, resultó novedosa la aprobación de una ordenanza que le agrega una franquicia más al sistema: las personas trasplantadas o las que estén a la espera de serlo.

El Concejo Municipal aprobó en su sesión del jueves pasado una ordenanza por la cual las empresas del TUP rosarino deberán transportar gratis a todas las personas que hayan sido sometidas a un trasplante de órganos, o que estén en lista de espera en el Sistema Nacional de Procuración y Trasplante de la República Argentina (Sintra) y con residencia permanente en el país.

La nueva norma establece que todo aquel que recibió un trasplante o espera hacerlo, deberá presentar un certificado expedido por el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), en el momento de subirse a los colectivos para percibir su boleto gratis, según reseñó la presidenta del Concejo, Daniela León.

Bajo esta nueva norma, habrá sanciones contra las empresas que no concedan el beneficio a estos usuarios, y se sumará a la ordenanza 7802 de regulación del TUP en Rosario donde se dispone quienes se consideran pasajeros franquiciados y exceptuados del pago total o parcial de la tarifa.

El proyecto, presentado por la concejala León, tomó como fundamento que “el Incucai está facultado para extender un certificado–credencial cuya sola presentación sirve para acreditar las condiciones de beneficiario del régimen de protección integral para las personas trasplantadas y en lista de espera”.