Con el objetivo de luchar por la paridad en las Comisiones Directivas de los clubes de la ciudad y llevar adelante capacitaciones permanentes en materia de género, la Red de Clubes (entidad que nuclea a las instituciones barriales) creó en marzo la Mesa de Género y Diversidad. La realidad en Rosario indica que solo entre el 15 y el 20 por ciento de estas instituciones tiene una mujer en la presidencia en tanto que la presencia de las mismas ocupando órganos administrativos disminuye tanto más grande sea el club. Asimismo, el número de subcomisiones y/o secretarías de género es baja o nula.

Rocío Bentos, secretaría del Club Atlético Industrial Social y Deportivo de Funes, explicó que la mayoría de los clubes no cuentan con subcomisión de género o secretaria de género, aunque existe casos en los que sí, tales como Club Atlético Provincial, Newell's y Rosario Central. "En los clubes de barrio es muy difícil poder establecer ese tipo de organigrama, entonces cada integrante de la CD tiene algún grado de responsabilidad en determinada cuestión. En los más grandes lo que cuesta es romper con la hegemonía patriarcal", detalló a Rosarioplus.com.

En relación con la participación de las mujeres en las Comisiones Directivas, la integrante de la Mesa de Género mencionó que "depende de qué tan grande o importante sea el club". Es decir, en las instituciones más chicas, que están emplazadas en barrios populares y, por tanto, en zonas más vulnerables, la mayoría de las integrantes son mujeres, aunque "por lo general" el presidente es un varón.

En este sentido, indició que entre un 15 y 20 por ciento de los clubes tienen a una mujer en la presidencia en tanto que en las instituciones más grandes, las mujeres no pueden siquiera ocupar órganos de administración (tal es el caso de Newell's y Central, donde sí ocupan los cargos de vocales).

El caso de Náutico

Tras una denuncia por un hecho de violencia de género contra el presidente, un grupo de socias autoconvocadas del Club Náutico Sportivo Avellaneda impulsó formalmente a multas de abril la creación de una Subcomisión de Género y Diversidades. Sin embargo, desde la Comisión Directiva respaldaron al presidente y aún no respondieron al pedido de estas mujeres que ven la necesidad de conformar un espacio que efectivamente vele por sus derechos y sea el puntapié inicial para lograr mayor participación formal en la política del club. 

El presidente de la reconocida institución de zona norte fue denunciado penalmente el mes pasado por una profesora de zumba que asegura haber sido maltratada al finalizar una de sus clases. “Se acercó a increparme a los gritos frente a todas las alumnas presentes, con su mano en alto, tratándome de pelotuda y rebelde por no haber comprendido una sugerencia”, contó Belén en un posteo en su cuenta personal de Facebook al que tiempo otro hecho ocurrido en 2019 donde el mismo directivo le “da una palmada en la cola”.

En dialogo con este medio, Elisa Pontillo contó que el grupo de socias autoconvocadas elevó dos cartas a la Comisión Directiva ya la Comisión Fiscalizadora para pedir una asamblea extraordinaria además de presentar  proyecto formal para crear la Subcomisión. Por su parte, la CD solo respondió a una de las misivas explicando que no considera  "adecuado" la conformación de la misma y advirtiendo que "está en estudio un proyecto para la generación de un espacio formal y con asistencia de profesionales idóneos” para el abordaje de cuestiones relacionadas con perspectiva de género.

Así las cosas y sin una respuesta a la solicitud formal para conformar la Subcomisión (que cuenta también con el apoyo de socios de la institución), las socias autoconvocadas de Náutico se reunieron esta semana con las edilas que integran la comisión de Feminismos y Disidencias del Concejo Municipal, quienes en la última sesión del Concejo impulsaron la aprobación de una declaración donde expresaron su "solidaridad" con las mujeres del club de zona norte.

En este marco resulta pertinente recordar la reciente sanción de la Ordenanza N ° 10.130 (promulgada en enero) que establece la “capacitación obligatoria en materia de género para todas aquellas personas que integran la comisión directiva y sean autoridades de asociaciones vecinales y clubes sociales, culturales y deportivos”.

En tanto, desde la Mesa de Género también expresaron su acompañamiento: "Esta no es una guerra contra el club ni la CD sino todo lo contrario, es un proceso de construcción ”, subrayó Bentos.

Y agregó: “Entendemos que la sociedad ha dado un vuelco en relación con la ampliación de derechos para mujeres y disidencias y que estos procesos llevan un tiempo. Nos encontramos dentro de un universo de instituciones que vienen siendo patriarcales desde sus inicios. En muchos casos hay resistencias, como pasa en todos los sectores de la sociedad. Los propios dirigentes vienen de una generación donde el patriarcado ha sido el sistema reinante. Los clubes no pueden quedar por fuera del contexto social ”.

Pensar al club con otra lógica

Una de las cuestiones planteadas por las socias de Náutico es la "falta de ofertas deportivas" que incluyan a las infancias y madres en un mismo horario, a modo de facilitar la logística de familias que en muchos casos están encabezadas por una mujer. "Parte del grupo auto convocado son mujeres madres, jóvenes, profesionales trabajadoras. Varias son sostén de familia. Buscan en el club un lugar seguro para el crecimiento de sus hijes, tanto en la socialización, como para el ejercicio de deportes", señalaron a este portal.

Otro punto que subrayaron que, si bien existe la posibilidad para los socios de armar un "grupo familiar monoparental", la falta de perspectiva de género no contempla un ajuste del monto de las cuotas (teniendo en cuenta que, en este caso, el grupo es solventado por un único ingreso familiar). "En un grupo familiar 'tipo', se toma per se al hombre como titular del grupo, situación que acarrea distintos tipos de incomodidades y problemas a las mujeres madres de ese grupo familiar", agregaron.