Shell subió desde este miércoles el precio de sus combustibles un 4,3% promedio y se sumó a los incrementos anunciados en los últimos días por el resto de las petroleras que operan en el segmento minorista.

En todos los casos, las subas respondieron a la apreciación del dólar y al avance del precio del crudo Brent, de referencia en el mercado argentino, que viene con un tendencia alcista en las últimas semanas hasta superar los 72 dólares el barril.

De esta manera, la petrolera Raizen tiene vigente desde la 0 hora de este miércoles los nuevos precios para los combustibles Shell, que en la Ciudad de Buenos Aires serán: $49,54 para el litro de V-Power nafta; $42,98 para el de Fórmula super; $47,98 para el de V-Power diesel; $41,51 Fórmula Diesel. 

Desde la mañana de este martes la estatal YPF dispuso un aumento en el precio de sus combustibles del 4% en promedio, dos puntos porcentuales por debajo de la suba que aplicó la privada Axion desde la medianoche del miércoles.

El precio de referencia de los surtidores de YPF en la ciudad de Buenos Aires, pasó a ser para la nafta Infinia de $48,47 por litro, la nafta Súper $42,01, el Diesel 500 $39,65 y el diesel Infinia $46,40.

En tanto Axion subió los precios de sus combustibles un 6%, con lo cual sus productos pasaron a ser de de $40,93 para la súper, $47,45 la nafta premium, $38,94 el Diesel 500 y el Euro diesel, 45,20.

Las marcas YPF, Shell y Axion controlan más del 90% del mercado de combustibles en el segmento de venta al público, y a ellas se sumaron con similar política de aumentos otras compañías del sector como Puma, Dapsa y Gulf.