Un informe del sindicato de docentes del nivel privado, Sadop, estableció que de todos los colegios de Rosario donde sus alumnos abonan cuota, solo el 16% cuenta con aire acondicionado. El 64% cuenta con ventiladores de techo. Por lo demás, 8,6% procura despejar la ola de calor con ventiladores de pie, y un 0,6% simplemente no tiene ninguna de esas alternativas.

"El 77% de las escuelas no está en condiciones de soportar las altas temperaturas y a pesar de los días que estamos transitando, no tomaron medidas excepcionales como desobligar al alumnado o aplicar la dispensa para que asistan a clases sin uniformes", fustigó el sindicato de docentes de nivel privado, Sadop, en un comunicado oficial.

El planteo repara en que estas falencias ocurren pese a que “el 56% de esos mismos colegios ya tuvieron problemas de salud tanto en alumnos como en docentes, derivados de las altas temperaturas de estos días”. 

El secretario general de Sadop Rosario, Martín Lucero, afirmó: “Laboralmente el ámbito donde tratar estos temas es el comité mixto de higiene y seguridad. La regla es, en las escuelas privadas, que la entidad propietaria tome las medidas para garantizar que las clases se puedan dictar sin afectar la salud. El tema de ser flexibles en la vestimenta es una herramienta, acondicionar los ambientes es otra. Pero llegado el caso si las condiciones no permiten que se den clases, no se puede poner en riesgo la salud del alumnado”.

Sadop relevó el panorama de instituciones privadas de enseñanza en Rosario en vistas de analizar cómo sus directivos invierten el dinero de las cuotas que mes a mes abonan los padres de alumnnos y alumnas. “Sólo el 16% de las escuelas cuenta con aire acondicionado, el 64% con ventiladores de techo, el 8.6% con ventiladores de pie y el 0.6% con ningún sistema de refrigeración”, estableció el informe. 

Sin embargo, el financiamiento básico es estatal. “Los sueldos vienen subsidiados desde la Provincia y la plata que ingresa de las cuotas supuestamente son para mantenimiento e infraestructura. Bueno este es un buen ejemplo de donde deberían invertir”, sostuvo Lucero. Y en este mismo sentido agregó: “Los padres tienen que exigirles a las entidades propietarias inversión en esas cosas”.

Desde Sadop aclaran que la idea es evitar conflictos y que “se imponga el sentido común porque se sobreentiende que nadie quiere tener niños o niñas con vómitos, dolor de cabeza, irritaciones de manera innecesaria ni tampoco a docentes a punto de desmayarse”. 

“Las entidades propietarias tienen la potestad de suspender temporalmente el dictado de clases. Si no también le asiste al sindicato la potestad de reclamar por el deber de seguridad que tienen que garantizar los empleadores y tomar alguna medida de acción directa. No es lo que se busca. Lo normal es tomar una medida razonable para el cuidado de la salud”, concluyó Lucero.