Un Policía español denunció el beso "repentino y no consentido" que una mujer le dio durante el dispositivo desplegado contra el referéndum independentista del 1 de octubre de 2017 en la calle Vía Augusta frente a los Servicios Centrales del Departamento de Enseñanza. 

El beso al agente se produjo después de que interviniera unas "urnas electorales y mientras se iniciaba el repliegue de los funcionarios entre gritos, insultos, agresiones y vejaciones". El agente de la Unidad de Intervención Policial (UIP), conocidos como los 'antidisturbios', consideró que puede ser un delito contra la libertad sexual recogido en el artículo 181 del Código Penal.

"Mi reacción, además de asco, fue de contención ante la extrema violencia que vivíamos en cada colegio", señaló el agente, que además explicó que la mujer lo estuvo insultando y cuando vio que había cámaras cerca le agarró por el cuello con las dos manos, "inmovilizándole", para propinarle un beso en la boca.

La petición del agente en la denuncia

El agente pide en la denuncia la identificación de la mujer. Ofreció una fotografía del momento y un video donde se aprecia el beso. Reclama una orden de alejamiento de mil metros y la prohibición de comunicación con el agente por cualquier medio. "Al agarrarme de la parte baja del casco, no puedo zafarme ni impedir que doble mi espalda, todo ello al intentar evitar tener una respuesta brusca al abuso que pudiera desencadenar una situación de riesgo aún mayor para la integridad de los actuantes de la que ya estábamos soportando", añadió. Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) respaldan la denuncia.