Con una luna de miel lista para ser vivida, ¿quién necesita un marido? Eso es lo que pensó esta recién casada que cuando su marido confirmó que no podía ir ya que no le llegó a tiempo su visa de viaje, no se quiso quedar sin rumbear por el mundo.  

​​Huma Mobin no se entristeció para nada. Sin duda no era lo que esperaba de un viaje de bodas, pero peor era no hacerlo. Así que armó valijas y se dispuso a disfrutar de un viaje de soltera, pero también se tomó el tiempo como para hacer que lo extrañaba. 

Así lo muestra una serie de curiosas fotos en que se la ve abrazando el aire, en clara muestra de que le faltaba el marido en ese tan especial recorrido. De todas manera se la ve muy divertida, lejos del dramatismo por el viaje no hecho juntos. Al fin y a la cabo ya habrá tiempo para conocer algún destino juntos.