"Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros, otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende", sostiene el escritor uruguayo Eduardo Galeano en su popular microrrelato llamado "Un mar de fueguitos". Algo de eso es lo que se pone en juego desde hace 15 años en el barrio Moderno, más precisamente en Espinillo al 4200, donde los vecinos y vecinas -en su gran mayoría pertenecientes a las comunidades qom, mocoví, guaraní- se reunirán una vez más parar celebrar el solsticio de invierno y enviar fuerzas al sol.

"La fogata se hace desde 2007 y salió con el Presupuesto Participativo. Fue un proyecto muy pensado y trabajado en el barrio con distintas instituciones. En aquella ocasión se hizo en ocho barrios de la ciudad y es la única que se sigue haciendo hoy en día", señaló a RosarioPlus Mariela Mangiaterra, directora del Centro Cultural El Obrador, espacio que organiza esta importante actividad para el barrio, que desde el 2019 no se realizaba por causa de la pandemia de coronavirus.

"Estamos con mucha expectativa de volver a encontrarnos", indicó la gestora cultural.

Sobre el significado que tiene el ritual para esta comunidad, Mangiaterra explicó: "Se trata del momento de mayor recogimiento, cuando hay que vivir de los frutos de lo que se siembra en otros momentos del año y se le pide al sol que recobre fuerzas para que recomience el ciclo. Es una ocasión para dejar lo viejo atrás, lo que no queremos, y pensar en las cosas que queremos que vengan. Tiene que ver con la construcción, con los deseos tanto personales como colectivos".

En tanto, subrayó que la fogata es una tradición de "comunidades que viven en relación a los ciclos de la naturaleza" y que por tanto atraviesa a todo un barrio marcado históricamente por el flujo constante de las migraciones internas: "El Obrador esta ubicado en un lugar que fue zona semirrural. Hoy los límites de la ciudad se extienden cada vez más pero estamos muy atravesados por esa cultura rural. En el barrio hay mucha migración de personas de distintas comunidades, fundamentalmente del Chaco que, en su momento, estaban vinculadas con la actividad algodonera y azucarera".

La actividad

"Hoy este fuego vivo nos vuelve a reunir en ronda para celebrar juntxs este ritual para dar fuerza y calor al sol que se encuentra lejos... Y a través del poder transformador del fuego quemar lo que queremos que se vaya y renovar deseos para el ciclo que vendrá", sostienen los organizadores en una gacetilla de invitación a la actividad que tendrá lugar este jueves en Espinillo al 4200, en la zona oeste de la ciudad. La última edición presencial tuvo lugar en 2019 y asistieron unas 150 personas. Tanto en 2021 como en 2022 se desarrolló de manera virtual con fogata hogareña y deseos enviados a través de pantallas que luego fueron recopilados en un video.

A las 14 habrá un espacio de serigrafía donde se podrán llevar textiles para estampar, a las 15.30 será el momento del Payaso Billi y a las 16.30 comenzará el recorrido "colorido y ruidoso" por el barrio. A partir de las 17 se hará el encendido de la fogata, percusión baile y lectura de deseos. La animación estará a cargo de La Profesora Argentina (María Franchi) y el acompañamiento del Colectivo Crea (percusión y danza de Guinea).