El Charrúa por fin se sacó la mufa y pudo ganar en el campeonato, pero en la previa tuvo que soportar una larga espera por un hecho que no suele ocurrir en el mundo del fútbol. El inicio del duelo ante Ituzaingó, en Buenos Aires, estuvo demorado por varios minutos por una amenaza de bomba que obligó a la intervención de especialistas que aseguraran el normal desarrollo del espectáculo.

Según las primeras especulaciones, la amenaza podría estar relacionada con una interna de la barra que se manifiesta en los últimos partidos que Ituzaingó juega de local. En esa localidad también son frecuentes los llamados anónimos a escuelas y otros eventos públicos.

El partido tenía que empezar a las 15.30, pero los peritos y la Aprevide no dieron garantías hasta las 16.15. A lo largo de los 90 minutos Central Córdoba pudo por fin demostrar el valor de su nuevo plantel y se impuso por 2 a 0 con goles de Pereyra y Fernández. 

El de Tablada consiguió triunfar en cancha de Ituzaingó después de 30 años. El próximo compromiso será en el Gabino Sosa, frente a Italiano.