La fiscal a cargo de la causa que investiga la muerte del joven músico, Adrián Rodríguez, el pasado domingo a la noche adelantó que “es temprano para tener hipótesis”, pero se peritarán los equipos y el local con un electricista, un perito electrónico y otro de higiene y seguridad. “Será sometido a peritaje para establecer qué sucedió. Disyuntor había en el local”, aseguró.

La fiscal Valeria Piazza Iglesias detalló en conferencia de prensa que “la clausura del local es provisoria, que volverá a abrir cuando se terminen los peritajes, que no dependen de mí”. No hay resultados preliminares aún de la autopsia al cuerpo del músico.

Entre lo secuestrado, Piazza detalló: “En ese momento se secuestró el micrófono, y ahora dos consolas, un amplificador, una “patchera” (que reúne todos los cables), y el bajo”. Recordó que el dueño del bar colaboró en la causa desde el primer momento, y se tomaron fotografías y filmaciones que se encuentran confiscadas.

El resto de los miembros de la banda Raras Bestias, de la que formaba parte Rodríguez, fue citado a declarar por la fiscal, así como también citará a otros músicos rosarinos: “Estoy viendo comentarios de otros miembros de bandas que están comentando en las redes sociales, y los voy a citar a declarar también”.

Según detalló la fiscal, “el cantante sufrió una descarga que impactó de lleno en el bajista, pero aún no hay resultados porque recién solicité el sorteo de los peritos para hoy, para los equipos de audio y del local, donde no ingresó nadie desde el momento del hecho”.

Recordó que en la madrugada del lunes, Piazza fue al local y realizó entrevistas a algunos asistentes y miembros de la banda. “El cantante estaba muy shockeado en el momento del hecho, y el padre y el hermano del joven fallecido se hicieron presentes poco después, claramente consternados”.

Desde aquel momento, efectivos de Control y convivencia a pedido de Seghezzo hacen guardia para que no entre nadie al Café de la Flor.