Las decenas de generaciones de futbolistas callejeros que padecieron el atroz suplicio de observar, con lágrimas en los ojos, cómo el Tramontina ingresa en la unión de los gajos desgastados de la única pelota disponible en el barrio podrán dormir tranquilos.

Este miércoles por la tarde, en Villa Gobernador Gálvez, se realizó un hecho de justicia histórica: fue detenida una mujer que contaba con el abultado prontuario de romper cuatro pelotas de fútbol 5.

Según fuentes policiales, una mujer de 29 años denunció en la Sub Comisaria 26º, ubicada en Nahuel Huapi al 2600, que su vecina la amenazó de muerte con una cuchilla oxidada. La vehemente reacción de la agresora tuvo como origen un singular episodio que no debería alterar el orden público: el hijo y los sobrinos de la víctima estaban flojos de puntería y desperdiciaron un penal tirando la pelota a la casa lindera. 

La denunciante detalló que ya son cuatro las pelotas que la intolerante vecina le rompe a los chicos. Finalmente, aplicando rigurosamente la ley, la mujer fue demorada por amenazas, y por pinchapelotas.