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Juan Audisio, abogado defensor de Alan Funes y Jorgelina Selerpe, anticipó que apelará la imputación de múltiples delitos que las fiscales Georgina Pairola y Gisela Paolicelli le endilgaron a esta pareja, sobre todo por la mujer, de quien él sostiene que no merece las mismas acusaciones que pesan sobre el muchacho de barrio Tablada.

El letrado argumentó que Funes estaba, y está, en peligro, de la misma manera que lo está su familia, debido al prolongado conflicto que mantiene en la zona sur de la ciudad. Y se basó en la denuncia que está radicada en la comisaría 16ª días atrás, debido a un ataque a balazos contra su vivienda familiar, y el hallazgo de un objeto que simulaba una granada de mano frente a la casa de su abuela. De aquel atentado, la policía recogió 17 vainas servidas frente al domicilio de los Funes.

Debido a esa situación de riesgo -infirió el abogado- es que Funes se mantuvo prófugo de la Justicia hasta esta semana, cuando un allanamiento de policías y de agentes federales lo sorprendió durmiendo en una casa de Callao al 3900 con su novia. Allí secuestraron una pistola calibre 9 milímetros que, según las fiscales, se comprobó que fue la utilizada para asesinar a Marcela Díaz, el domingo 14 en Lejarza al 5600. Pairola y Paolicelli revelaron que el peritaje balístico sobre uno de los proyectiles que ultimó a esa mujer reveló que fue disparado con esa pistola secuestrada en la casa allanada, debajo de un bidet. Funes negó toda relación con ese arma y se declaró inocente del homicidio. Un delito que depara una pena mínima de 8 años de cárcel, en caso de probarse su autoría. Y sólo es uno de los delitos que le imputaron.

Audisio insistió con la teoría de los Funes bajo amenaza: "Se presentó tiempo atrás un escrito en el fuero de Menores para procurar conservar la integridad física (de Alan) por los atentados que estaba teniendo él, su padre Jorge Funes en Alvear y, lo que es conocido, el homicidio de su hermano, Ulises Funes", expuso.

Por otra parte, intentó relativizar la validez como prueba judicial del video que lo muestra a su cliente disparando una ametralladora en festejos de Año Nuevo: "Ese video aún no ha sido peritado", desestimó.